Nostalgia, si este libro se tuviera que describir con una sola palabra, seria esa.
Este excelente libro funciona en tu cerebro como una carretera de dos carriles por que a la vez que lees las remembranzas del autor, resurgen las de tu infancia que creías olvidadas.
Supongo que para desarrollar esta novela hubo mucho estudio y mucha investigación pero llega al lector en un lenguaje sencillo, amigable, en pocas palabras "ligerito".
Es un libro de amor a la familia, a la tierra y sobre todo al padre que aunque no es el personaje principal se siente como un ala protectora que te acompaña hasta el final de la novela.
El ejemplar que yo tengo llego directamente de las manos de su escritor el Dr. Jose Maria Chavez Aguirre. Lo leyó mi viejo y le gusto, lo leí yo y me pareció muy bonito, me lo "ejecute" en un suspiro por que no tiene donde atorarte, donde no entender. Se lo pasamos a Memo un amigo que lo disfruto enormemente por que el creció en Mixcoac, entonces le movió muchas fibras, el se lo paso a su mamá que es quien ahora lo esta leyendo.
Tengo el presentimiento que no va a regresar a mi casa, pero no tiene importancia por que me doy cuenta que va alegrando el rato de todos los que lo vamos leyendo y si es así, que siga viajando.
Se los recomiendo mucho.
Este excelente libro funciona en tu cerebro como una carretera de dos carriles por que a la vez que lees las remembranzas del autor, resurgen las de tu infancia que creías olvidadas.
Supongo que para desarrollar esta novela hubo mucho estudio y mucha investigación pero llega al lector en un lenguaje sencillo, amigable, en pocas palabras "ligerito".
Es un libro de amor a la familia, a la tierra y sobre todo al padre que aunque no es el personaje principal se siente como un ala protectora que te acompaña hasta el final de la novela.
El ejemplar que yo tengo llego directamente de las manos de su escritor el Dr. Jose Maria Chavez Aguirre. Lo leyó mi viejo y le gusto, lo leí yo y me pareció muy bonito, me lo "ejecute" en un suspiro por que no tiene donde atorarte, donde no entender. Se lo pasamos a Memo un amigo que lo disfruto enormemente por que el creció en Mixcoac, entonces le movió muchas fibras, el se lo paso a su mamá que es quien ahora lo esta leyendo.
Tengo el presentimiento que no va a regresar a mi casa, pero no tiene importancia por que me doy cuenta que va alegrando el rato de todos los que lo vamos leyendo y si es así, que siga viajando.
Se los recomiendo mucho.
2 comentarios:
querida karen, qué alegría. BIEMBENIDA al universo bloguero, jajajajja
Me lo apunto.
Pero no soporto prestar libros, ¡qué entereza la tuya!
Bsssssss
Cloti
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